Por Marco Antonio Benavides López, arquitecto urbanista
El desarrollo sostenible contiene tres conceptos estructurales: sostenibilidad, desarrollo y crecimiento, que se conjugan para establecer un compromiso de responsabilidad compartida en la gestión del territorio.
“La sostenibilidad, se asume como el compromiso de satisfacer las necesidades, sin socavar el derecho de las generaciones futuras para obtener sus recursos, garantizando equilibrio entre la preservación ambiental, crecimiento económico y bienestar social.”
El crecimiento económico, concepto que relaciona indicadores de producción, producto interno bruto, renta de bienes y servicios que la estructura productiva de un territorio genera en un tiempo determinado; en tanto, la economía urbana cataloga a la ciudad, como una unidad de análisis por su naturaleza de clúster de bienes públicos, promotora de interacciones, capacidad administrativa y responsabilidad política (Miró, 2018).
El concepto de desarrollo, significa crecimiento sostenible, progreso, esfuerzo compartido y evolución hacia la mejora de las cualidades de un producto o proceso que garantice el bienestar social.
Estos conceptos, que acompañan las actividades humanas, se constituyen en los argumentos para construir el desarrollo territorial sostenible, planificar el entorno urbano y rural, tratar con responsabilidad los problemas social, económico, ambiental y físico-espacial, a partir de estrategias como:
- Reciclar: se puede reciclar casi todo y darles un segundo uso a objetos, bienes muebles e inmuebles, estructuras, entre otros, evitando consumir más recursos para su producción.
- Comprar productos de comercio justo: iniciativa que busca concientizar al consumidor, para que apoye a pequeños productores a incursionar en el mercado.
- Reducir el consumo de energía: incentivar el uso de energías renovables y la reducción del consumo, ayudarán a gastar menos y cuidar el entorno natural (Oxfam Intermón, s.f.).
Es necesario que nuestros países se comprometan con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, especialmente con el Objetivo 8° el cual, le apuesta a “Promover el crecimiento económico sostenible, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos”; convoca a contribuir con recursos para superar la pobreza, la segregación social y espacial, con mejores apuestas de sostenibilidad y combatir la degradación ambiental agravada por las actuales circunstancias de salud pública en el mundo.
“Es necesario que nuestros países se comprometan con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, especialmente con el Objetivo 8° el cual, le apuesta a “Promover el crecimiento económico sostenible, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos”
Es importante entender que los modelos productivos y dependencia económica imperantes hacen que los países pobres presenten serios desequilibrios en sus entornos urbanos, como consecuencia de la incapacidad para orientar procesos de desarrollo sostenible, generación de oportunidades, empleo productivo, construcción de infraestructura y vivienda digna, generando mayor incertidumbre frente a sus expectativas de desarrollo.
En ese sentido, debemos reconocer que las ciudades son escenarios de impacto, que afectan el cumplimiento de los acuerdos frente a la crisis ambiental, salud y cambio climático. Muchas de ellas carentes de recursos para cumplir compromisos, y quizá por conveniencia de gobiernos que no quieren comprometer su capital político al contradecir los dictámenes de la banca mundial, los monopolios financieros y las grandes empresas.
“(…)las ciudades son escenarios de impacto, que afectan el cumplimiento de los acuerdos frente a la crisis ambiental, salud y cambio climático. Muchas de ellas carentes de recursos para cumplir compromisos, y quizá por conveniencia de gobiernos que no quieren comprometer su capital político al contradecir los dictámenes de la banca mundial, los monopolios financieros y las grandes empresas.”
Como lo refiere la ONU-DAES (2018), “Ahora que los vientos de las recientes crisis empiezan a arreciar y que la demanda, el comercio y las inversiones globales empiezan a cobrar fuerza, los gobiernos se encuentran finalmente en situación de salir del modo crisis y dar al mundo un rumbo más sostenible”.
Para el efecto, se identifican cuatro áreas estratégicas que pueden permitir avanzar hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible aplicables al territorio:
- Diversificar las economías: las economías débiles, son susceptibles al impacto de los cambios en los ciclos de inversión; la actual crisis económica, exige restructurar las fuentes de ingresos mediante reformas fiscales con inclusión social.
- Atajar el crecimiento de las desigualdades: se deben mejorar las condiciones de vida de la población vulnerable y trabajar en la igualdad de oportunidades; las inversiones sociales, mejorarán el crecimiento económico a largo plazo.
- Hacer más sostenibles las finanzas: se necesita una nueva arquitectura financiera que transfiera de manera gradual, los billones de operaciones centradas en beneficios a corto plazo, hacia inversiones a largo plazo en investigación, desarrollo, infraestructura, capital humano y salud pública.
Como consideración final, es urgente, abordar el problema de la desinstitucionalización en todos los niveles, mediante la defensa de la democracia, el estado de derecho y la transparencia en las actuaciones públicas; prevenir la inestabilidad política, como principal obstáculo para lograr el precepto de desarrollo sostenible; mejorar la capacidad, eficiencia y eficacia en la administración y gestión pública, con claras apuestas para combatir la corrupción en el manejo de los asuntos territoriales.
“(…) es urgente, abordar el problema de la desinstitucionalización en todos los niveles, mediante la defensa de la democracia, el estado de derecho y la transparencia en las actuaciones públicas; prevenir la inestabilidad política, como principal obstáculo para lograr el precepto de desarrollo sostenible.”
Referencias:
MIRÓ, Albert P. (2018). Concepto de crecimiento de la urbanización. European Journal of Applied Business Management 4 (2), 16 de April de 2018, p. 43-57.
ONU-DAES (2018). Cuatro pasos hacia una economía global más sostenible. Nueva York: Departamento de las Naciones Unidas para Asuntos Económicos y Sociales.
OXFAM INTERMON (s.f). Las 5 claves de la sostenibilidad económica. Barcelona: Fundación Oxfam Intermon. (Mensaje en un blog). Recuperado de https://blog.oxfamintermon.org›las-5-claves-de-la-sostenibilidad-economica/