Por Aldo Facho Dede, arquitecto urbanista.
Suscriben: Sylvia Vásquez, Carlos Muñiz, Carlos Morales y Flavio Vila.
A casi dos años del inicio de la pandemia de la Covid-19, nadie es ajeno al durísimo impacto que ha tenido en nuestras vidas y economía. Dicho contexto demandó acciones extraordinarias, que fueron lideradas tanto por el estado como por el sector privado y organizaciones ciudadanas. Asimismo, exigió un mayor esfuerzo en la reducción estructural de la pobreza, que se incrementó del 20,2% al 30,1% en sólo un año. En ese sentido, el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS), logró importantes avances en materia de planificación y legislación urbana, acceso a la vivienda, humanización de los espacios públicos, y dotación de los servicios de agua y desagüe. Ello mereció el reconocimiento de importantes instituciones y organismos, como ONU-Hábitat, Banco Interamericano de Desarrollo, Banco Mundial, Colegio de Arquitectos del Perú, Ciudadanos al Día, entre otros.
Según el Informe de Transferencia de Gestión y Rendición de Cuentas, publicado el 3 de agosto, los principales logros que se habrían alcanzado en el primer semestre del año son:
Acceso a la vivienda: La mayor colocación histórica de bonos del Fondo Mi Vivienda, lo cual permitió que muchas familias accedan a una vivienda digna durante la crisis sanitaria, al mismo tiempo que se le dio un impulso a la reactivación del sector inmobiliario y construcción.
Agua y desagüe: La transferencia de S/ 300 millones para garantizar la continuidad del servicio de agua potable que brindan las Empresas Prestadoras de Servicios, para asegurar el acceso al agua de las personas más vulnerables durante la crisis sanitaria; así como la ejecución de 231 obras a nivel nacional.
Reactivación económica: El destrabe de cerca de 700 proyectos de agua, saneamiento, infraestructura y equipamientos urbanos; así como la elaboración de guías para el uso temporal de los espacios públicos, en el marco de las medidas de reactivación económica del país, bajo un enfoque de accesibilidad, inclusión y sostenibilidad. Ello permitió la reactivación del sector construcción, y la reapertura de cientos de comercios y mercados locales.
Planificación urbana: La formulación consensuada de la Ley de Desarrollo Urbano Sostenible, aprobada por el Congreso de la República, cuya reglamentación permitirá generar suelo urbano para vivienda de interés social, equipamientos y espacios públicos, en el marco de una adecuada planificación urbana y territorial; a la vez que habilita la aplicación de instrumentos de financiamiento para la construcción de obras que mejoren la calidad de vida de las personas.
Estos, y muchos otros avances, deben poder continuar y ampliarse, es por ello que necesitamos un liderazgo claro, en la línea de la Política Nacional de Vivienda y Urbanismo, así como de profesionales capacitados y con experiencia para dirigir el sector.
«Si bien es una práctica habitual realizar cambios en puestos de confianza cuando se inicia una nueva etapa, ello no debiera significar la pérdida de la capacidad de gestión que nos ha permitido avanzar en los objetivos de aportar a la construcción de ciudades más humanas, justas, sostenibles, competitivas, saludables y resilientes.»
Confiamos en la visión y liderazgo del Sr. Ministro de Vivienda, Construcción y Saneamiento, quien seguro sabrá poner al Perú por delante de intereses políticos y partidarios.